miércoles, 21 de diciembre de 2011

Mi madre, mi vida

Mi madre murió. Ayer. No tuve más que venir a la escuela, mi padre me obligó. Todo funciona normal. Los estudiantes caminan presurosos para llegar a sus clases, se habla del estrés de los finales, de las calificaciones “injustas” que los profesores “ponen” a los alumnos… pero ante mis ojos, ya nada tiene sentido. Ella era mi vida entera.

 Lo que hago es consecuencia de la costumbre y nada más. No se por qué ni para qué lo hago, sólo lo hago. Once treinta de la mañana; me dirijo a mi clase de Lingüística, lo hago porque así dice mi horario.  Solía ser de las clases más armoniosas, me agradaba, quizá aún me agrade.

 –“La Migala”, Juan José Arreola- dijo el profesor. Sí, quizá necesite una migala al igual que el narrador de la historia que el profe relata. Pensar en que una migala me visita, en las horas más profundas de mi angustia podría tranquilizarme.

No soporto estar en la escuela. Siempre fui una persona solitaria; en realidad me tiene sin cuidado lo que piense la gente. Pero pretender que no pasa nada… es inhumano. No puedo soportar la presión de mi pecho, el dolor de mi estómago y una tristeza tan profunda que me invade; como el gas invade una pequeña habitación y los que ahí se encuentran, poco a poco van muriendo.

 -No quiero que vayas al funeral de tu madre, y punto.- Ésas fueron las palabras de mi padre impositor. Jamás lo he comprendido. El habría querido que estudiara tanto como el: diversas licenciaturas, maestrías, uno que otro doctorado… no, yo no nací para eso. Me gustan las letras, leer, escribir; realizarme en el mundo que yo narro. El sólo lee Cortázar. Dice que es, de los escritores, el único.

La impotencia que se siente al no poder ver a tu madre por última vez… quisiera dejarla ir, deslindarme de su cariño, de sus caricias, de su amor. Es imposible. “Aunque sabía que no iba a despertarse, estaba despierto.”

Julio Cortázar, en su historia “La noche boca arriba” tenía razón. Estoy despierta, y lo único que me queda por hacer es escribir.

Cada letra, una lágrima.

Como si soplara brillantina. Así me gusta dejarme llevar por una historia. Quiero desaparecer. Quisiera poder ensordecerme para dejar de oír historias de Juan José Arreola.

Doce en punto. Casi puedo percibir el olor a tierra mojada. Un escalofrío recorre mi cuerpo, una parvada de agonía nubla mi mente, más de una lágrima se desliza por mi impávido rostro. –Debes afrontarlo sola. Por tu bien, debes dejar de escribir. Ya te dije que esa narrativa inútil a la que llamas “existencial juvenil” es algo estúpido; sólo te nubla la vista, te obstaculiza de tus objetivos-. Son palabras constantes de la boca de mi padre. Desearía pensar así ahora, pero no hay más que me logre calmar.

No quisiera seguir. Sus besos eran mi razón, su calor mi capacidad, su sonrisa mi alegría.

Irradia el calor del sol, mas yo siento frío. Se está helando mi corazón. Una de la tarde. Ella ya no está. Mi padre ha hecho lo que ha querido. Siento un dolor en el pecho. Ahora yo haré lo que necesito. Ya no hay más. Sólo tomo la pluma y sé que no hay más.

Ya te veo. Al final del sendero, te veo a ti. Tu travesía cesó. ¡No te vayas sin mi! Aún no aprendo a mantenerme derecha si no te veo al final. Aún no comprendo cómo dejar la huella que tú ya has sabido estampar. ¿Cómo voy a conocer el camino si mi guía ya no está? No te escondas. No te vayas. No te vayas madre mía, porque como a ti, a nadie más sé amar.

4 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado mucho pero es taaan triste!! recordé algunos momentos que he pasado, espero sea solo un escrito, un instante de inspiración, de ficción y no la realidad q estes viviendo o hayas vivido, si s así, no tengo palabras para ti, para ello...
    Hoy fue tu cumpleaños, espero haya sido un buen dia para ti... t dejo mis felicitaciones y un sentimiento d lejanía y olvido q espero algún dia comprendas

    ResponderEliminar
  3. Afortunadamente es ficción. En el blog aparece mi cumpleaños? porque de no ser así, no se de donde lo sacaste! fue un buen día... muchas gracias! no comprendo el sentimiento... cómo te topaste con mi blog? me conoces? quisiera saber. un beso!

    ResponderEliminar
  4. Que bueno que es mera ficción. No sabes lo mucho que me gusta entrar a tu blog y leer tus escritos. Que bueno que te la pasaste muy bien en tu día y claro que contestarte a tus cuestionamientos pero lo haré en la medida que crea conveniente hacerlo.
    No, la fecha de tu cumpleaños no aparece en tu blog, pero es una fecha que tengo muy presente con felicidad pero al mismo tiempo con tristeza... no pretendo que comprendas esos sentimientos ahora, pero espero un día llegues a entenderlos o más bien a entenderme... la forma en que llegué a tu blog creo que es un poco irrelevante pero no sabes lo contento que estoy por haberlo hecho... por último la pregunta que quizás es la más importante, la que probablemente te causa más intriga, ¿te conozco?,¿nos conocemos?... si nos conocemos... aunque, creo q no... no, la realidad es que no nos conocemos, en algún momento creí que si pero después me di cuenta que era y soy tan solo un extraño en tu mundo, al cual alguna vez pretendí pertenecer e ingenuamente creía que así sería, pero todo fue una simple ilusión temporal.
    Quizás creo más dudas e incertidumbre de las que respondo pero realmente creo que no es pertinente ir más a fondo para respetar la decisión que en su momento tomaste.
    Te pido de favor me sigas dando la oportunidad de seguir leyendote, es la única forma de estar en contacto con un pedazo de tu mundo y eso me hace muy feliz...
    Ojalá hayas tenido un buen fin e inicio de año, que sea un próspero 2012 para ti, un abrazo.
    Lo siento, en verdad lo siento :(

    ResponderEliminar